Esta quincena me pillas en etapa de “adaptación”, volviendo poco a poco a la rutina, cambiando el chip de tránsito y bajando nuevamente al estado de paz física y mental que solo consigo por completo cuando estoy en casa.
Esta semana, tan de volver a mi, estuve habitando bastante la siguiente pregunta: ¿qué pasa cuando las adicciones son a cosas totalmente legales, normales y cotidianas?.
Ni siquiera pensemos en el tabaco y el alcohol. ¿Qué pasa, por ejemplo, con el café, el azucar.. las redes sociales?.
En mi caso, esta semana, confirmé que cuando necesito evadirme Y estar “productiva”, instagram y el mate son una bomba mortal.
Lo escribo y me da risa, me siento un poco exagerada y hasta ridícula, pero es verdad. Esta semana puse fin a mi consumo de mate hasta sentirme que estoy “limpia” y mañana, con motivo de cambio de principio de mes, pongo en pausa también a instagram.
Te cuento esto porque es lo que está pasando en mi vida. Tenía otros temas para conversar y profundizar pero siento que este espacio tiene que ser lo más real posible y, la verdad, llevo los últimos días transitando este estado.
Uno de mis descubrimientos de la semana fue enterarme (ya lo sospechaba) que soy bastante procrastinadora.
Había escuchado mucho sobre el término y realmente no lo tenía relacionado con algo TAN negativo, pero estos días entendí que me define. Resumiendo, mi lucha semanal fué sobrevivir sin cafeína-mateína, darle orden a algunas cosas antes de comenzar mi rehab de instagram y rediseñar mis métodos de trabajo para remar contra el falso multitasking y la sensualidad abrumadora del navegador de internet.
La cosa es que el hecho de mi nueva Pausa me dio todas las razones para darle orden a las cosas.
Mi adicción ya está encaminada y no tengo ganas de tomar mate, así que me puedo considerar triunfante. Con respecto al instagram utilizaré este mes para testear cosas y ver si puedo gestionar la red social de una manera productiva, sin involucrarme mucho y dándole el uso que le corresponde: poder compartir mi trabajo y fotografía con otras personas.
Además me pondré al día con cosas pendientes y podré atacar mi lista de to-do offline que incluye varias cosas pero una que me emociona por demás: montar el laboratorio de fotografía en casa.
Desde que me mudé a Berlin llevo dando vueltas con mis químicos sin tomarme el tiempo de ponerme con ello. Este mes va a ser una de mis prioridades. Para romper con la procrastinación y darle vida sin excusas, es una de los contenidos que estaré compartiendo en mi patreon, así que si te interesa o tenés ganas de montarte un laboratorio casero pero funcional en casa, podés sumarte a mi comunidad y acompañarme en la causa.
Para dar final a esta sesión te voy a contar y compartir dos cosas:
+ Estoy haciendo un taller de video que se llama “video cartas”. El video es algo que domino cero pero que me suma mucho a la hora de contar historias. Por eso, a mi estilo y con las pocas herramientas que tengo, he hecho este video que acá te comparto.
Es mi primer video del canal, asi que si lo mirás y querés darle a me gusta y de paso seguir el canal, será un gran aporte a este momento tan inicial.
El ejercicio de taller era enviar una video carta a otra compañera y a mi me tocó Ana. En esta video-carta le cuento como me siento en estos días de volver a Berlín.
+ Esta semana también comenzó Flores, un taller que tenía tiempo con ganas de dar. Flores está pensado para trabajar la relación que tenemos con nuestro propio cuerpo a través de la fotografía, puntualmente el autorretrato.
Sinceramente estoy nerviosa, es un taller muy personal: si fuera un traje sería uno hecho a mano, de esos que te quedan como un guante. Solo espero que el textil sea lo suficientemente elástico y suave para que se adapte a cada una de las mujeres que lo están haciendo.
Ya te iré contando.
Creo que eso es todo amigue.
Ha sido una quincena muy movida y siento que ahora que he descansado estoy lista para contarte sobre todas las aventuras que hemos vivido fuera de casa.
Hasta próximos días!
Disfruta mucho estos primeros días del mes!
Lucía