Llevo tiempo buscando empezar a hablar de mis fotos, pensando cómo mostrarlas y, sobre todo, dónde.
El otro día sentí el deseo irrefrenable de hacerlo acá.
Encuentro un lugar de paz en substack. Un espacio en el que expresarme con espontaneidad, soltura e inspirada en el comunicar y compartir.
Por eso, hace unos meses, empecé a familiarizarme con la idea de utilizar ese espacio para compartir mi fotografía.
Pensé muchísimo en cómo y, sinceramente, no llegué a una conclusión.
Pero si tengo claro dos cosas: quiero compartirlas hablando de su contexto, de sus por qué, cuándo y cómo; tampoco tengo que buscar una forma sino disponerme a empezar a escribir.
Tengo tantas fotos y tanto tiempo acumulando imágenes que, ponerme a hacer esto, me genera muchísima emoción y paz.
Diciembre del 2022 - Treptower park, Berlín.
Es mi primer diciembre viviendo en Berlín y también mi primer mes de vacaciones, fuera de la rutina que me acompañó durante los últimos 3 años. Ya no tengo que despertarme y saltar directo al ordenador. No hay horario que cumplir ni teléfono del cual no poder separarme.
Es Diciembre del 2022 y coincide con mi primer Pausa en instagram. Que grandiosa experiencia, un viaje al más allá.
Hice tantas cosas.. Mi vida cambiaba radicalmente y se convertía en una nueva: despreocupada, tranquila, con energía y creatividad renovada, un momento nuevo de la vida.
Diciembre fue helado, pasé mucho tiempo en casa pero también en la calle, viviendo, compartiendo, disfrutando mi incipiente entorno social, los nuevos proyectos, las nuevas amigas y mujeres que nutren mi vida.
El 9 de diciembre fui al sitio dónde revelo y busqué provisiones.
Compré varios carretes diferentes: Cinestill 400 para la sesión de Flores que tenía al día siguiente, dos positivos que nunca había probado y este B&N “Berlin 400” de lomography.
No soy mucho de disparar en B&N, pero quería probar este carrete hacía tiempo.
Esas fotos son de los días más fríos de diciembre, en uno de nuestros paseos por el parque, encontrándonos con el lago congelado y un montón de gente patinando, jugando al hockey o con trineos.
Una estampa que en persona hablaba de otros tiempos pero en imágenes aun más. Una estética en la que primaban los tonos marrones, oscuros y claros, trineos, palos de hockey y trineos; parecían de otra época, como si hiciera años que estaban guardados.
Miro las fotos y me tele-transporto. Hace mucho frío pero estoy muy abrigada. Guantes, bufanda y múltiples capas, hasta plantillas de corderito en las botas.
Vuelvo a la foto y siento como resbalo por el hielo, caminando con emoción y un poco de respeto. Es el lago que miro cada día desde fuera, en sus 360 grados, solo que exepcionalmente lo hago desde dentro, como si estuviera en sus entrañas.
Estas fotos las hice con una Zenit 12xp que compré el año pasado. No termino de entender aun si el poco foco en las imágenes es mi culpa o de la cámara, aunque igual el desenfoque es rara vez algo que no me perzca bien.
Me gustaría volver a probar este carrete con otra cámara y ver cual es el resultado.
Este carrete es el primero de una serie que disparé intuitivamente re-conectando con el acto de registrar puramente desde la emoción.
Este Diario se irá publicando dos veces al mes y será un espacio para compartir mi fotografía más cotidiana durante este 2023.
Una forma de dejar de acumular imágenes y contar más historias sobre lo que entretejen los días,
Me encanta esta idea, me gusta ver la historia detrás de las fotos y estas en particular transmiten un montón, siento que esta secuencia podría ser un corto. Ya esperando la próxima edición💖
Qué increíble diario fotográfico. Soy muy poco creativa visualmente pero muy muy receptiva a las imágenes. Me hacen sentir cosas y me inspiran a escribir aunque no escriba necesariamente nada relacionado a esas imágenes. Tienen el poder de hacerme viajar. Estas fotos definitivamente me llevan a un lugar que no conozco (aunque conozca Berlín) y me dan tanta tela para cortar en palabras que no sé dónde ponerla. Gracias ♥️